Summary: | Más que un espacio geográfico, Occidente es un ámbito cultural continente de una amplia diversidad de capitalismos configurada desde el siglo XVII de manera interactiva con el mundo de las naciones iniciado en Westfalia. Allí y entonces hubo instituciones creadas espontáneamente en la sociedad civil, pero también otras que fueron el fruto de la iniciativa actuada por al sociedad política en cuya cúspide se encuentra el Estado gobierno. El capital institucional de las naciones occidentales fue capitalista por separar la propiedad de los medios de producción de los productores directos, por establecer una jerarquía de remuneraciones en función de la división del trabajo, y por consagrar el régimen salarial. nunca ni en ningún lugar el capitalismo fue meramente una organización de empresas privadas, sino siempre y en todo caso resultado de la conjunción público/privada, Estado/mercado, micro/meso/macroeconómica, Dadas las dificultades operativas en la administración de un Estado occidental que nunca existió, la construcción del capitalismo moderno y posmoderno se asienta en economías nacionales referidas a un universo de gobierno relativamente manejable para desarrollar la productividad de los factores en los casos de organización productiva, pero a no hacerlo, o muy lentamente, en el caso de las improductivas. En ambos escenarios de productividad en los factores, las mentalidades nacionales tienen una influencia determinante porque las instituciones del capitalismo occidental son tan diversas como sus usos y costumbres.
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