| Summary: | En el segundo volumen de TAXONOMIA DE LOS OBJETIVOS DE LA EDUCACIÓN, Bloom y sus colaboradores estudian los correspondientes al ámbito de la afectividad. Los autores se lamentan de la escasa importancia que se confiere a dichos objetivos, ya que, en la mayoría de los casos, los centros escolares se limitan a valorar los cognoscitivos. Otro de los inconvenientes de esta preterición es el reducidísimo número de trabajos dedicados al análisis de la afectividad en el campo de la educación. Tanto es así, que consideran el suyo casi enteramente original y nos advierten constantemente que sus deducciones no son definitivas y que habrán de corroborarse con nuevas experiencias. Sin embargo, y quizá por esto mismo, la obra es ,muy notable y de gran interés para cuantos se hallan implicados en el mundo de la educación. Se estudian los objetivos afectivos de un modo jerárquico, desde los más elementales hasta los más complejos. Son numerosos los ejemplos p r á c t i c o s que proponen en las distintas categorías, labor que avala definitivamente esta obra.
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