Resumo: | La incidencia de los procesos malignos esofagogástricos ha aumentado en la última década. Históricamente, la cirugía se ha considerado el mejor tratamiento para esos cánceres. No obstante, la supervivencia a largo plazo después de la cirugía es sólo aceptable en el mejor de los casos, por la tendencia de la enfermedad a recidivar localmente y a distancia. En estos momentos, el tratamiento de esos cánceres consiste en cirugía, quimioterapia y radioterapia. En este artículo se comentan varios métodos de tratamiento que utilizan esas modalidades, solas o en combinación, intentando mejorar las tasas de supervivencia de los pacientes que tienen procesos malignos gastroesofágicos.AU
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