Summary: | En este mundo, los adultos nos sentimos un tanto dueños de la verdad, nuestras aproximaciones con los/las jóvenes suelen ser en una vía: transmisoras, informativas, ¡hay tanto por enseñar! Sin embargo, hemos perdido la capacidad para escuchar, creemos que los/las jóvenes, los otros , no tienen nada que decir, o más bien que lo que tienen que decir no podría ser de importancia. Así también, hemos perdido la capacidad de asombro, no tenemos nada más por aprender, apostamos a verdades absolutas y construcciones finales. Esta investigación transmite las voces y silencios de las tribus urbanas, narra sus melodías y temores, expresa su arte y sus sueños... Se vive en una ciudad oculta, invisibilizada por el olvido y los prejuicios. Como una conexión entre los sentires más profundos que de tanto desearlos se vuelven realidades, así encontré a las primeras agrupaciones juveniles, no me hizo falta buscarlas, simplemente estuvieron ahí, expuestas para quienes queríamos verlas, invisibles para aquellos absortos en sus rutinas de vida, o para quienes decidían ignorarlas. Mis intenciones no son por ello meritorias, son más bien la respuesta a una necesidad
|